Una cicatriz es el producto final del periodo de cicatrización, ya sea a causa de un corte o una herida o por un proceso quirúrgico.
El tratamiento de las cicatrices es muy importante no sólo a nivel estético, según la Medicina Tradicional China (MTC) según dónde esté la cicatriz puede cortar el flujo de energía de los meridianos que pasan por esa zona, por ejemplo una cicatriz producida por una cesárea horizontal corta al menos el flujo energético de cinco meridianos y esto puede producir diferentes alteraciones tanto a nivel físico como emocional, estos síntomas varían dependiendo de los meridianos afectados y de cada persona.
Según Peck, G. (1989), a nivel local, los efectos de una cicatriz pueden ir desde un ligero entumecimiento hasta dolor servero y posiblemente inflamación, dependiendo de la intensidad de la obstrucción y del Qi (energía) de la persona afectada, especialmente el Wei Qi o energía defensiva.
Además hay algunas heridas que cuando cicatrizan forman adherencias, las adherencias pueden ser el resultado de una mala sutura. En los casos de un proceso quirúrgico, el cirujano al hacer la sutura debe hacerlo por planos, para de esta forma evitar que la cicatriz se retraiga y se adhiera a planos más profundos, formando así la adherencia. Visualmente normalmente se aprecia como una hendidura en algún punto de la cicatriz, pudiendo causar dolor en ese lugar o incluso en alguna zona más distal (alejada de la cicatriz), ya que todas las cadenas musculares están interconectadas.
Antiguamente por desconocimiento de tratamientos para las cicatrices, poco se hacía con este tema, se esperaba que el cuerpo cerrase la herida y soldara esa parte del cuerpo con la otra del otro lado.
Hoy en día, si tienes alguna cicatriz que notes de alguna manera diferente que el resto de la piel, aprecias adherencias, te produce dolor y/o desde que tienes la cicatriz tienes alguna molestia física o incluso alguna alteración emocional que antes no tenías, la Medicina Tradicional China te puede ayudar, ya que existen diferentes técnicas para abarcar su tratamiento, como por ejemplo:
Masaje con aceites o ungüentos (por ejemplo aceite esencial de Rosa Mosqueta o aceite de Argal, que son regeneradores celulares por su alto contenido en antioxidantes, vitaminas A y C principalmente, que producen colágeno) trabajando directamente encima de la cicatriz, masajeando en forma de círculos alrededor de la cicatriz y en zig-zag pasándole por encima.
Tratamiento con moxa suave, esta técnica consiste en aplicar calor mediante un puro de artemisa (moxa) que se acerca a la cicatriz y se va moviendo sobre ella, esto activa la circulación de energía y Sangre, favoreciendo la recuperación. Esta técnica puede combinarse con la acupuntura.
Tratamiento con ventosa, se utiliza normalmente una ventosa facial, de diámetro pequeño, también trabajando primero alrededor de la cicatriz y luego pasando por encima de ella.
Tratamiento con acupuntura, tratando puntos distales de los meridianos afectados para restablecer el flujo energético y por si existen dolencias tanto físicas como emocionales.
Y tratamiento con electroacupuntura, pinchando agujas de forma transversal alrededor de la cicatriz, en sentidos diferentes en los dos lados de la misma, estas agujas se estimulan con electroacupuntura, para movilizar la zona, eliminar las adherencias y reducir las marcas producidas en la piel.
Todos estos tratamiento se pueden realizar una vez se tenga el alta médica y la cicatriz esté del todo cerrada.
Si tienes alguna cicatriz y no te gusta su aspecto y/o te produce dolor o molestias de algún tipo, ¡no te lo pienses más! Ahora ya sabes que se pueden tratar
Fuente: Meridians